En primer lugar, quiero pediros disculpas por no haber podido escribir la entrada de la semana anterior. La semana fue bastante completita, con jornadas de trabajo maratonianas y largos viajes, así que mi Semana Santa ha sido bastante peculiar. Este tipo de semanas, afortunadamente no son lo más habitual, aunque cada vez lo son más, pero sirven para recordarme la importancia de la búsqueda de la independencia financiera. No he tenido tiempo de escribir como habéis visto, y tampoco he podido mirar durante la semana lo que han hecho los mercados y ahora, con algo más de tiempo, bueno, no mucho realmente, he comprobado que las circunstancias del mercado han cambiado bastante poco, a pesar del atentado en Bruselas.
Este atentado me ha cogido de viaje y una circunstancia así, te pille donde te pille, supone una preocupación más para la familia que para el que viaja (que no suele enterarse demasiado y sólo sufre los inconvenientes del máximo celo posible en los controles aeroportuarios). Pero sobre todo, te recuerda lo efímero de la vida y lo importante que es aprovechar los momentos que pasas con los tuyos.
Personalmente no fui consciente de lo ocurrido hasta que me lo contó el agente que me atendió en el mostrador de la compañía de alquiler de coches en un aeropuerto en Norteamérica. Realmente y sin entrar en detalles, las medidas de seguridad de los aeropuertos de origen, escala y de destino me parecieron muy exageradas, pero no me imaginaba que se había producido un atentado en el aeropuerto de Bruselas.
Las bolsas ya son prácticamente inmunes a noticias de este calado, muy a nuestro pesar, parece que nos estamos insensibilizando ante la barbarie. Desde este humilde rincón de internet, mi más sincera condolencia a las familias de las víctimas.
Aunque no quede bien enlazar un tema con otro, este es un blog de inversión y entiendo que quien entra a leer estas líneas espera encontrar comentarios sobre bolsa, dividendos, etc., así que con vuestro permiso, me pongo con ello, pero no podía dejar de comentar lo anterior.
Algo, que para muchos es un aburrimiento, la inversión en dividendos es en mi opinión un proceso que aporta tranquilidad y facilita mi salud mental: Nuestras empresas no nos harán ricos en dos días, pero tampoco nos deberían arruinar en este mismo tiempo. Si no podemos mirar nuestra cartera de inversiones una semana, un mes o incluso un año, es bastante más probable que cuando volvamos a ver cómo estamos, sigamos ganando los mismos o más dividendos de lo que lo hacíamos antes. Y esto no lo puede decir todo el mundo que invierte en bolsa.
A pocos inversores les desagrada ver cómo crece el precio de las acciones, sobre todos aquellos que buscan fundamentalmente un retorno directo en base a la compra y venta de títulos en el mercado de valores. Sin embargo, esta circunstancia no es del todo de mi agrado y aunque lo he comentado en otra ocasión, voy a intentar explicar los motivos para esta opinión:
Muchas veces no se me entiende cuando digo que no quiero que suban mis acciones y la razón es bastante sencilla. Mientras sea un comprador neto de acciones (y lo voy a ser seguramente durante bastante tiempo todavía al estar en fase de formación de cartera) me interesa comprar al precio más barato posible de forma que pueda adquirir el mayor número que pueda de acciones que paguen dividendo ahora y en el futuro. Por lo tanto, si el precio de las acciones que estoy comprando bajan o se mantienen, me encuentro en una situación idónea de inversión.
Si el precio de las acciones sube, lo único que conseguiré es que me suba la parte del ego inconsciente que ve como su cartera crece, pero esto me dificultará comprar más acciones que paguen futuros dividendos. Así que una bolsa alcista es, en general, mi enemiga.
Desafortunadamente y de forma habitual, el flujo de caja personal no es todo lo fluido que siempre nos gustaría y forma parte de nuestro trabajo como inversor intentar optimizar en la medida que podamos cómo empleamos el capital disponible. Sin embargo, no creo que debamos estresarnos en exceso con la elección del momento óptimo de compra (ojo,... y lo digo yo que en ocasiones se me ha escapado un título por la cabezonería de querer comprarlo 1 céntimo más barato... ¡gran error!).
¿Porqué cuento todo esto? Pues es sencillo. La bolsa es alcista a largo plazo y eso juega en nuestra contra, por lo que en la medida que la bolsa nos de oportunidades como las actuales, hay que aprovecharlas. Y nos digan lo que nos digan y diga quien lo diga, esto es así y no puede ser de otra forma en la medida que la bolsa sólo acaba reflejando la evolución de la humanidad, así que salvo que una guerra mundial nuclear o un virus informático nos vuelva a la edad media, la bolsa históricamente va a seguir subiendo.
Y aunque siempre nos pueden enseñar multitud de ejemplos en los que eso no es verdad (Telefónica en la época de Alierta son casi 16 años y esto ya da para varios artículos diciendo que la bolsa no sube siempre a largo plazo,... o eso intentan hacernos creer, o por ejemplo la bolsa de Japón en los últimos 25 años), la realidad es otra bien distinta y os muestro un gráfico que elaboró Nomura a finales del año pasado:
Indudablemente, a largo plazo (el largo plazo de verdad y no el que nos convenga, la bolsa de Japón sigue siendo alcista), aunque los últimos 25-30 años han sido unos años perdidos para los inversores en Japón,... ¿verdad?,... pues ni tan siquiera eso es cierto, ya que mientras se producía la caída del índice desde 1991 hasta mínimos de 2004 los inversores han podido seguir comprando y por lo tanto bajando el precio medio de sus títulos. Por lo que, esto no es tan sencillo como mirar el valor de un gráfico un año hace muchos años y la cotización actual y decir... "pues mira que poco has pagado o mira todo lo que has perdido",... el camino es muy importante y más aún para nosotros los inversores en dividendo, que no sólo invertimos de forma continuada sino que además reinvertimos los dividendos recibidos aprovechando el mecanismo del interés compuesto.
A continuación damos un repaso de las noticias que considero más interesantes de la semana... así que espero que sean de vuestro interés: