La búsqueda de la independencia financiera, tal y como ya he comentado en más de una ocasión, es un proceso que puede calificarse de muchas formas, pero ninguna es sexy y con esto me estoy refiriendo a que no es un proceso atractivo o llamativo porque requiere de una constancia y perseverancia en un periodo largo, y por qué no decirlo, algunos sacrificios que no todo el mundo está dispuesto a asumir.
A modo de resumen, para el éxito de un inversor en dividendo hay que conseguir ahorrar de forma sistemática, invertir los ahorros en empresas que paguen buenos dividendos (entiéndase por buenos aquellos que ofrecen compañías sólidas, de forma continuada y creciente), diversificar los riesgos de la inversión, estudiar las inversiones a realizar y vigilar las realizadas. Todo esto debe hacerse durante un periodo largo de tiempo y es justamente esta lentitud en la obtención de resultados la que hace que muchos se queden a lo largo del camino.
Siempre he defendido que, según mi opinión, todo el mundo con independencia de sus conocimientos iniciales sobre inversión puede lograr la autonomía suficiente en la toma de decisiones que tengan implicaciones en sus inversiones y en general de todas sus actividades económicas como para, con el tiempo, mejorar su nivel de vida.
Pero también, igualmente he defendido que, si no se está completamente comprometido con la forma elegida de conseguir la independencia financiera, es decir, si se van dando tumbos de estrategia en estrategia, de método en método, lo más probable es no sólo fracasar en el objetivo, sino llegar a pensar que es imposible.
Sin embargo, tengo que decir, que en esta carrera de fondo en la que algunos llevamos ya unos años invirtiendo en dividendo (con su posterior reinversión de los mismos) aprovecha un gran poder: el interés compuesto y eso hace que conforme más se avance en el ejercicio del plan, más claro se ven los resultados del mismo. El lo que algunos llaman el efecto bola de nieve, que conforme avanza se va haciendo más grande ella sola.
Recuerdo haber comentado en una entrada antigua que ahorrando el 70% del neto que se gana, se puede ser financieramente independiente en unos 10 años. Esto tiene múltiples problemas que creo que no es necesario listar aquí. Pero sí creo que es mucho más factible ahorrar un 30-35% de todo lo que se gana, haciendo algún sacrificio, pero sin vivir mal. Esto nos permitiría alcanzar la independencia en un plazo mayor, pero de forma más cómoda y realizable.
En la sociedad actual de consumo se nos "obliga" a vestir de una determinada forma, cambiar de vestuario con frecuencia, conducir un determinado coche, consumir en definitiva productos que seguramente no necesitemos. Puede que necesitemos un coche, pero si en lugar de comprarte un Audi, BMW o un Mercedes, puedes comprarte un Ford o un Renault o un Dacia, estarás ahorrando. En lugar de comprarte ropa de la marca tal, te la compras en las tiendas de Inditex o incluso limitas las compras a la época de rebajas, también estarás ahorrando (siempre que no te vuelvas loco por comprar sólo porque está "barato"...¡uy!...¡ qué barata está esta camisa que sólo vale 90€ cuando normalmente vale 150€!... como decía un portero de una antigua serie de TV: "¡Un poquito de por favor!"... ¡que es una camisa!,... no creo que sea necesario acudir a las tiendas de chinos y comprarte una camisa de 9€,... pero esperar a las rebajas y comprarte una camisa de calidad por 20-30€ aunque no sea la última moda ... eso sí que es ahorrar).
Ejemplos de ahorro hay miles... unos más o menos frugales,... otros más o menos radicales. Cada uno debe tener en cuenta cómo quiere vivir su vida ahora y en el futuro y actuar en consecuencia.
Yo soy bastante moderado en los gastos asociados a mi persona, bastante menos en los gastos asociados con mi familia. Me encanta el diseño de los coches de Jaguar y BMW,... pero tengo un Ford, tengo ropa sin marca y admito que bastante con marca... pero toda mi ropa de marca ha sido y será comprada en rebajas o en outlets y mis camisas duran muchos años, porque son de calidad y porque las cuido. Monitorizo de forma casi obsesiva mis gastos e invierto todo lo que puedo y más. Y digo que invierto más de lo que puedo en referencia a que si bien no puedo ahorrar todo lo que me gustaría, otra forma de invertir más es buscar ingresos adicionales que me apoyen en mi camino (de algo me tenía que servir haber estudiado tanto).
Bueno, antes de entrar a comentar algunos resultados de esta semana me gustaría llamaros la atención por la situación del cambio Euro-Dólar:
Como se aprecia en el gráfico, el Dólar sigue fortaleciéndose. Esto favorece a empresas como ENCE (y su cotización así lo muestra), pero en general si lo que queremos es invertir en EE.UU. la evolución del cambio Euro-Dólar nos perjudica mucho ya que encarece nuestras compras al valer menos nuestros Euros.
El gráfico se encuentra en un momento importante, ya que se acerca a la fuerte zona de resistencia creada por la tendencia a largo plazo que se inicia en el gráfico en Marzo de 1985 y ya no me parece descabellado que la subida de tipos (de la que la FED vuelve a hablar y que se ve a poyada por los buenos datos de paro en EE.UU.) nos llevara a la paridad Euro-Dólar o incluso a que el Dólar valga más que el Euro a lo largo de 2016. A medio plazo pensar que el Euro puede caer hasta los 0,8$ parece una locura, pero técnicamente no es descabellado ya que los 0,8$ forman la siguiente zona de apoyo siempre y cuando se pierda la paridad.
Por lo tanto, si yo fuera una empresa que quiere invertir en EE.UU. en el futuro, tendría ahora mismo el dinero en una cuenta en dólares.
Si me permitís una opinión más, yo que creo que 2016 será el año en el que por fin el mercado norteamericano corrija de verdad. Los índices siguen siendo alcistas, lo sé, pero la construcción de los mismos impide que se vea la caída del mercado hasta que esta está bastante avanzada y salvo un grupo de acciones tecnológicas todopoderosas y de gran capitalización, el resto del mercado americano no está tan boyante como nos quieren hacer pensar con la evolución del índice. Ya dije hace tiempo que mi objetivo para el año que viene contemplaba un fuerte incremento en inversión en EE.UU. y que pensaba dejar una reserva para intentar aprovechar una teórica caída en el mercado norteamericano, pero por desgracia creo que la fortaleza del dólar no me va a permitir comprar con las rentabilidades que me gustaría. Ya lo iremos contando.
Mientras tanto y por si estoy equivocado respecto del mercado en EE.UU., seguiré comprando en España porque todavía creo tenemos buenos precios y mejores rentabilidades en grandes empresas.
Como en las semanas anteriores, a continuación damos un repaso a alguno de los resultados trimestrales presentados esta semana. Espero que sean de vuestro interés: